Con la nueva configuración del país a partir de las pasadas elecciones del 6 de junio, se perfilan nuevos retos en cada uno de nuestros ecosistemas de innovación y emprendimiento que se observan a nivel nacional.
Desde un punto de vista general ahora la realidad obliga a tomar un liderazgo desde abajo. Tomando en cuenta un modelo más cercano a las personas. En el centro de la decisiones, la agenda pública serán las mismas personas, es por ello que resulta preciso observar que las transformaciones recientes nos obligarán a pensar diferente.
Ecosistemas variados
Existe variedad y en México los ecosistemas de emprendimiento han logrado destacar y enfocarse en modelos muy particulares, Desde Jalisco y su ventaja de albergar desde ya hace algunos años empresas tecnológicas de Estados Unidos, su enfoque muy a la Silicon Valley le ha llevado a nombrarse su sede Mexicana.
Cada uno lo suyo
El bajío, Querétaro, Zacatecas y en particular en Guanajuato el tener un presidente que le apostó mucho, en donde también como consecuencia del fuerte impulso nacional hoy adopta el tema de la mentefactura como bandera, así mismo albergar la Feria Hannover Messe y Yucatán en donde la seguridad y estabilidad social le ha permitido tener bienestar para innovar agregando también a las instituciones como el Centro Municipal de Emprendedores y el Instituto Yucateco de Emprendedores han logrado importantes resultados desde la política pública en favor del emprendimiento.
Ciudad de México por ser la capital de nuestro país, el centro financiero y administrativo con alto flujo de inversión y talento humano, por último Nuevo León con las empresas de materias primas más grandes a nivel nacional aprovecha su vocación altamente empresarial, además su cercanía con Estados Unidos como una ventaja competitiva.
Modelos propios
Considero que los modelos propios son necesarios pero más aún la reflexión de lograr una conversación urgente con los sectores que realmente aportan a que los ecosistemas sean más competitivos, la educación y los empleos de calidad, tomando como base la vocación de cada región.
En el Sureste
El reto es preciso en el Sureste, la disparidad que existe entre personas y otras regiones del país y misma que ha sido el efecto del centralismo durante muchos años atrás, fue consecuencia del importante rezago que sufrimos hasta el día de hoy, en todos los aspectos.
Los descuidos fueron creciendo hasta lograr un estado de inestabilidad. Esa era la norma antes. Ahora desde 2019 el enfoque cambió y Sureste por primera vez es tendencia y controversia nacional, ya sea por sus proyectos clave como la Refinería de Dos Bocas, el Tren Maya o el Corredor del Istmo de Tehuantepec. Algo que ha despertado incluso pasiones desmedidas en algunas personas.
A la fecha
Desde 2020 a la fecha 4 unicornios mexicanos han surgido y eso es gracias a un ecosistema más consolidado y que se ha estado consolidando a nivel nacional. Esta estadística seguramente ayudará mucho a las mediciones de 2021 en indicadores como los que genera Startup Genome.
La mejora de nuestros ecosistemas debe ser en consecuencia de abarcar mayores retos cada día. El enfocarnos mediante misiones a los valores y apretar las tuercas donde es necesario. Desde el entorno político se puede hacer mucho, pero para ello es sumamente necesario encontrar los liderazgos correctos.
En la educación es sumamente importante dejar de pensar en educar para el trabajo y comenzar a educar para innovar. Tomemos la oportunidad de lograr los cambios necesarios para nuestros ecosistemas del sureste.
Tomando en cuenta los indicadores internacionales y locales como el IMCO y demás es factible poder determinar una medición acertada de la realidad que nos corresponde y a partir de ello tomar decisiones arriesgadas.